El acero corten, también conocido como acero autopatinable o acero a la intemperie, es una aleación especial de acero que contiene cobre, cromo, níquel y fósforo. Su característica principal es que, al oxidarse, forma una pátina de óxido compacta y adherente que protege la superficie del metal de la corrosión progresiva, impidiendo que este avance hacia el interior del material, a diferencia del óxido común que suele desprenderse y deteriorar el acero.
Este proceso de oxidación controlada desarrolla la clásica capa rojiza-anaranjada que varía según la agresividad del ambiente y la humedad. Gracias a esta capa protectora, el acero corten tiene una resistencia mucho mayor a la corrosión atmosférica que otros tipos de acero, lo que le permite mantener sus propiedades mecánicas sin requerir pinturas o tratamientos adicionales para evitar el deterioro.
Fue patentado originalmente por la United States Steel Corporation en 1933 y desde entonces ha sido utilizado en arquitectura, arte y elementos al aire libre debido a su combinación de durabilidad, bajo mantenimiento y estética atractiva. En nuestro país, la fachada del Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) está hecha con acero corten.
Cuál es el proceso de oxidación natural del acero corten
El proceso de oxidación natural del acero corten inicia cuando el material es expuesto al aire libre y la humedad, permitiendo la formación de una pátina de óxido superficial que lo distingue por su color naranja-rojizo.
Fases del proceso de oxidación natural
Inicio: El acero corten se entrega con un aspecto grisáceo o metálico. Al contacto con el ambiente y bajo ciclos de lluvia y sol, comienza a oxidarse de manera superficial.
Formación de la pátina: Poco a poco, la superficie desarrolla una capa de óxido que primero es anaranjada y se oscurece con el tiempo. En las primeras semanas, esta pátina puede desprender partículas que se arrastran con el agua de lluvia, lo que puede manchar superficies porosas cercanas.
Estabilización: Después de meses (usualmente entre 6 meses y un año, dependiendo de la humedad y el clima), la pátina se vuelve uniforme, más marrón y estable. Esta capa actúa como barrera, impidiendo que la corrosión progrese hacia el interior del metal.
Consideraciones clave
Para que la pátina se estabilice de forma óptima, debe existir alternancia de humectación y secado en el entorno.
Una vez lograda la protección, el acero corten ya no requiere tratamientos adicionales ni pintura, y puede permanecer al aire libre por décadas.
Este fenómeno convierte al acero corten en una opción ideal para fogones y elementos exteriores, ya que su proceso de oxidación es controlado, decorativo y funcional.
Ventajas del acero corten en fogones
El acero corten ofrece ventajas sobresalientes como material para fogones, destacándose por su robustez, longevidad y estética única.
Principales ventajas del acero corten en fogones
Durabilidad extrema: El acero corten es hasta diez veces más resistente a la corrosión atmosférica que el acero común, gracias a la formación de una pátina de óxido protectora. Esto prolonga la vida útil del fogón por décadas en ambientes exteriores.
Mantenimiento mínimo: Una vez estabilizada la capa de óxido, el fogón no requiere tratamientos especiales ni pintura; basta con una limpieza básica ocasional.
Estética evolutiva y decorativa: El look industrial y la textura rojiza del acero corten se intensifican con el tiempo, creando un acabado atractivo que nunca es igual y embellece cualquier espacio exterior.
Resistencia a temperaturas y uso intensivo: El material soporta el calor elevado sin deformarse, permitiendo cocinar diferentes cortes de carne y otros alimentos con gran eficiencia y seguridad.
Función protectora: La pátina de óxido actúa como barrera, impidiendo que la corrosión avance y eliminando riesgos de deterioros prematuros.
Versatilidad de diseño: Permite fabricar piezas de diferentes formatos, tamaños y grosores, como el fogón QHIRI, adaptable para asar, calentar y ambientar.
Sostenibilidad: El acero corten es 100% reciclable al final de su vida útil y reduce la necesidad de mantenimiento y recursos adicionales.
Gracias a estas propiedades, los fogones de acero corten proporcionan belleza, funcionalidad y tranquilidad, volviéndose elementos centrales para reuniones sociales y la cocina al aire libre.
Mantenimiento fogón de acero corten
Mantener y cuidar un brasero de acero corten es sencillo y requiere mínimo esfuerzo, gracias a las propiedades naturales de este material.
Consejos para el cuidado y mantenimiento
Dejar que la oxidación ocurra naturalmente: La pátina de óxido que protege el brasero se forma al exponerlo a la intemperie (lluvia y humedad). Este proceso puede acelerarse lavando el brasero con agua limpia durante las primeras semanas.
Evitar superficies porosas: En la etapa inicial de oxidación, la pátina puede desprender partículas de óxido que pueden manchar superficies claras o porosas, como cemento o piedra. Conviene colocar el brasero sobre pasto, grava, losa o concreto resistente al calor hasta que la pátina se estabilice.
Ubicación adecuada: Colocar siempre el fogón sobre una superficie no inflamable y resistente al calor, evitando madera o pasto seco para prevenir riesgos de incendio.
Sin necesidad de pintura ni protector: Una vez formada la pátina, el fogón no requiere pintura ni ningún otro recubrimiento; la capa de óxido lo protege contra la corrosión atmosférica y el desgaste.
Mantenimiento básico: Se recomienda limpiar ocasionalmente con agua, retirando restos de ceniza, grasa o residuos. No es necesario usar productos químicos abrasivos ni aceites especiales.
Orificios de drenaje: El diseño del fogón incluye orificios para el drenaje del agua de lluvia, permitiendo que permanezca al aire libre todo el año sin acumulación de líquidos.
Estas simples acciones garantizan que el fogón de acero corten conserve su resistencia, funcionalidad y estética única durante décadas, convirtiéndose en un elemento central de decoración y cocina exterior.
Cómo prevenir la oxidación excesiva en el fogón de acero corten
Para prevenir la oxidación excesiva en un brasero de acero corten, lo más importante es permitir que la pátina protectora se forme correctamente y evitar condiciones que mantengan la superficie constantemente húmeda.
Claves para controlar la oxidación del acero corten
Asegurar buena ventilación y drenaje: El fogón debe instalarse en un lugar donde el agua pueda drenar libremente, evitando acumulaciones que mantengan la superficie mojada por largos periodos. Los orificios de drenaje en la base facilitan este proceso y deben mantenerse limpios.
Evitar el contacto prolongado con tierra o superficies porosas: Durante la etapa de formación de pátina, no colocar el brasero sobre tierra húmeda, pasto que retenga agua o piedra porosa, ya que esto puede acelerar la oxidación más allá de la capa superficial protectora.
No cubrir herméticamente: El acero corten está diseñado para resistir la intemperie, por lo que no necesita ser cubierto de forma hermética. Sin embargo, una cubierta ligera que permita la circulación del aire puede protegerlo en climas extremadamente húmedos o lluviosos.
Limpiar ocasionalmente la superficie: Retirar hojas, barro o residuos orgánicos que retengan humedad sobre el fogón ayuda a que la pátina se mantenga estable y funcional.
Evitar productos corrosivos: No aplicar sustancias químicas abrasivas, cloro o ácidos; sólo agua limpia es suficiente para acelerar el proceso de estabilización.
Siguiendo estos cuidados simples, el brasero de acero corten conservará su estética y durabilidad durante años, con la pátina actuando como escudo ante la corrosión y evitando oxidación excesiva o daños profundos.
